Estaba pensando, y mucho, acerca del sexo y también del amor.
La pregunta que me hago es: ¿Para que exista el deseo sexual, es condición necesaria la existencia del sentimiento amoroso?
Desde un punto de vista eminentemente lógico, la matriz de resultados quedaría como sigue:
- ¿Puede haber amor sin sexo?
- ¿Puede haber sexo sin amor?
- ¿Puede no haber ni amor ni sexo?
- ¿Puede haber amor con sexo?
Dado que la contestación evidente a los cuatro items es claramente "Si", supongo que en este tema no es tanto cuestión de llevar razón, como de afiliarse emotivamente en alguna de las preferencias, aunque evidentemente la adscripción viene determinada por un imperativo moral, condicionado por la cultura que nos ha tocado vivir.
Ejemplos de otras culturas con conductas aceptadas de índole sexual -muy bien documentadas- que podrían parecernos pecaminosas, cuando no disparatadas, las podríamos encontrar en cualquier manual de antropología al uso. Entonces, no separar ambos binomios: ¿Acaso no es un condicionamiento moral represivo de nuestra propia cultura? Todo es relativo.
Que el amor y el sexo esten indisolublemente imbricados el uno con el otro, y deba ser una condición necesaria para la relación de pareja -según nuestra cultura-; puede suponer un error fatal o acaso mucha hipocresía si en esta cuestión; la infidelidad parece ser lo más habitual y pragmático. Y si no es eso, queda la represión como otra posible alternativa.
Prefiero la difícil variante de la coherencia y la fidelidad; es decir: la alternativa del diálogo sincero con la pareja, la defensa de las libertades personales, el respeto a la privacidad y la verdad sobre los sentimientos hacia la otra parte.
Fuera de esto, lo demás todo es relativo cultural y moralmente...si así lo decidimos.
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